MARTE

Marte, como el Sol, es un principio masculino, aún más representativo del hombre en sentido físico estricto.  Marte representa la energía física y sexual. 

En una carta de mujer, Marte (por signo, posición en casa y aspectos) suele indicar más bien el tipo de hombre que busca.  Marte y el Sol son, los dos, principios masculinos, pero como la Luna y Venus, son sutilmente diferentes.  El Sol representa la naturaleza fundamental del hombre – su individualidad – . Marte demuestra una expresión de sí mismo más física y exteriorizada.   Cuando, en una carta masculina, Marte esta mal aspectado, le costará sentirse a gusto con su masculinidad (sobre todo con aspectos de cuadratura o de oposición a Saturno o Neptuno).  Por eso, la posición de Marte en una carta masculina proporciona al astrólogo muy buena información sobre la forma en que asume su papel en las relaciones.

MARTE EN LA CASA SIETE

La persona que tiene a Marte en la casa siete anda buscando emoción y reto en sus relaciones.  A veces, hay cierto grado de competitividad en la pareja cuando el sujeto tiene a Marte en esta posición, porque tiene miedo a que el otro lo domine y está dispuesto a tomar represalias a la menor  provocación.

Por otra parte, Marte en la casa siete puede indicar que el sujeto quiere más bien afirmarse a través de su pareja, y en consecuencia puede empujar al otro a menudo a actuar a favor de el.  Marte encuentra que la paz y la armonía son esencialmente antitéticas a su naturaleza, por lo cual los sujetos con Marte aquí tienden a provocar discusiones y situaciones explosivas sólo para crear una atmósfera mas emocionante.

Marte así situado puede indicar una pareja de tipo marciano (con un Marte fuerte o Aries bien marcado, en su carta) o la pareja puede tener una profesión asociada a Marte, tal vez en las fuerzas armadas o los deportes.

El sujeto con Marte en casa siete debe conocer su propia fuerza y lograr su independencia, sin lo cual las disputas y la falta de armonía teñirán sus relaciones.

JÚPITER

Los contactos de Júpiter entre dos persona son muy importantes, en cualquier tipo de relación.  Muestran cómo las dos disfrutan una de otra.  Incluso los aspectos más tensos pueden reforzar positivamente las relaciones, aunque también pueden exagerar las tendencias negativas.

JÚPITER EN LA CASA SIETE

Como Venus en la casa siete, Júpiter es una señal prometedora para el éxito de las relaciones.  La naturaleza expansiva de Júpiter puede ayudar mucho, a muchos niveles, en una relación. Algunas veces, el sujeto que tiene aquí a Júpiter tiene una salud excelente y una pareja importante.  Puede que la pareja sea generosa, honorable o filosófica, o puede ser todo eso a la vez.  Pero con un Júpiter mal aspectado, pueden estar presentes en las relaciones las cualidades menos deseables de este planeta.  El sujeto puede verse envuelto en relaciones con personas indignas de confianza o extravagantes.  En alguna ocasión, Júpiter en casa siete puede indicar una pareja con una personalidad muy dominante o propensa a hacer observaciones muy crueles cuando se enfada.

Como hemos visto con otros planetas en el contexto de la casa siete, aunque las cualidades del planeta en cuestión pertenecen al sujeto, la mayoría de las veces suelen ser proyectadas sobre otros.  Con Júpiter, se siente atraído hacia relaciones con gente que personifican la sabiduría, la fe y la generosidad.  En cierto modo, de forma parecida a quien tiene el Sol en la casa siete, pude sentirse oscurecido por su pareja y necesita encontrar sus propias cualidades jupiterianas.

La realización de un crecimiento personal y conjunto, de sabiduría y comprensión a lo largo de la relación es la dimensión más importante de Júpiter cuando ocupa la casa siete.

SATURNO

Lejos del temor que le tenían los astrólogos primitivos, los modernos se inclinan a ver este planeta como la clave del descubrimiento de sí mismo.  En una carta, Saturno representa lo que encontramos difícil, lo que nos exige esfuerzo.  Ser consciente de las cualidades que representa Saturno, comprenderlas en lugar de ignorarlas (o transferirlas a otros), equivale al efecto de encender la luz en una habitación oscura.  De esa forma, en vez de manifestar su aspecto frustrante, Saturno pude convertirse en maestro e iluminar al sujeto sobre los misterios de su naturaleza interna.

Los contactos de Saturno dentro de una pareja son indispensables si se quiere que la relación sea duradera y tenga sentido.  Aunque los aspectos difíciles de Saturno indiquen frustraciones y bloqueos dentro de la pareja, las dificultades pueden también forjar mucho crecimiento y mucha comprensión.  Si las dos personas son abiertas y honestas consigo mismas y con el otro, Saturno puede unir gracias a la comprensión más que separar con el resentimiento, la frialdad y el distanciamiento.

SATURNO EN LA CASA SIETE

Un Saturno en la casa siete no es nunca fácil, lo cual no quiere decir que no se pueda alcanzar éxito o gratificación, como hemos visto con este planeta.  Saturno representa las lecciones que hemos de aprender para llegar a ser personas más conscientes.  Con Saturno en la casa siete, recibimos esas lecciones en la experiencia de las relaciones de persona a persona.  En lo referente al amor, lo que menos nos importa tener consciente es el deber, la responsabilidad, las limitaciones y las frustraciones.  Pero si una relación de pareja ha de soportar la prueba de unos cuarenta años, la presencia bien aspectada de Saturno en la casa siete supone una ayuda considerable. 

Saturno en la siete puede indicar atracción del sujeto por una pareja de más edad o por una figura de padre y aunque sea difícil ver al “padre” representado por una mujer en la casa siete de un hombre, Saturno en ella suele indicar atracción hacia una mujer muy eficiente, muy disciplinada y “madura”.

Saturno en la casa siete muestra que el sujeto busca seguridad en la relación (puede incluso “jugar sobre seguro”), y cuanto mayor evidencia haya de seguridad, en el sentido material, mejor.  Sin embargo, el deseo de esto último, en el matrimonio puede ser a expensas de una verdadera relación emocional, y puede verse el aspecto cristalizador de Saturno en la forma en que el matrimonio adquiere un carácter de prisión para el sujeto.

Algunas veces, el sujeto experimenta no solamente soledad enel matrimonio, por ausencia de lazo emocional, sino también separación física y hasta crueldad e infidelidad.  A veces Saturno en esta posición significa que el sujeto se casará tarde, o a lo mejor nunca.  Pero este no es siempre el caso.

Lo que si es seguro con Saturno en la casa siete, es que las relaciones que se presentan nunca son superficiales; el cónyuge puede convertirse en una fuente de sufrimiento o en una fuente de grandes oportunidades para el crecimiento del individuo.